AGUASCALIENTES, AGS.- Sangrienta riña se registró en el Barrio de San Marcos y la cual terminó con dos lesionados, uno baleado grave y otro apuñalado, por lo que tuvieron que ser hospitalizados.
Ambos heridos quedaron bajo custodia de la Policía Municipal acusados de lesiones mutuas, aunque las autoridades ministeriales iniciaron una investigación para el esclarecimiento de los hechos.
El baleado resultó ser un adolescente de 17 años de edad, vecino de la Unidad Habitacional Guadalupe Posada, mientras que el apuñalado fue identificado como Fernando “N”, de 43 años.
Los hechos se registraron el domingo 4 de febrero, minutos después de las nueve de la noche, entre las calles Azteca, Talamantes y Guadalupe Posada.
Sobre lo sucedido surgieron varias versiones y no se había determinado cuál era la verídica.
Una de ellas señalaba que varios “cholos”, entre ellos el baleado, se encontraban viendo un partido de futbol americano por televisión pero que, a la vez, estaban buscándoles pleito a las personas que pasaban por el sitio.
Otra versión indicaba que tres sujetos, incluido el adolescente, pretendieron asaltar a dos jóvenes y despojarlos de un teléfono celular, por lo que los golpearon.
Los ofendidos gritaron pidiendo ayuda y el padre de ellos, Fernando, salió de su casa y al darse cuenta de la agresión a sus hijos decidió intervenir para defenderlos.
Este hombre sacó a relucir un arma de fuego calibre 25 y les disparó a los asaltantes, impactando al adolescente en el pecho, pese a lo cual corrió hacia una tienda para pedir ayuda.
Al parecer, los otros dos sujetos se le fueron encima a Fernando y lo apuñalaron en la espalda, dejándolo herido para luego darse a la fuga.
Vecinos del lugar reportaron la riña a los servicios de emergencia, por lo que los primeros en acudir fueron policías preventivos, que encontraron tirados a los dos lesionados.
A Fernando le apreciaron la pistola en la mano derecha y que se estaba desangrando, por lo que le aseguraron el arma y lo subieron a la patrulla 0540 para trasladarlo a recibir atención a la Clínica Guadalupe, donde quedó internado.
Mientras tanto, el adolescente fue auxiliado por paramédicos de la Cruz Roja y en la ambulancia AGS-22 llevado al Hospital Miguel Hidalgo ya que su estado de salud era delicado por el balazo recibido.
Pese a su condición, el muchacho alcanzó a acusar a Fernando de haberle disparado.
Poco después, la Secretaría de Seguridad Pública Municipal dio a conocer que solamente el adolescente y Fernando fueron los únicos participantes en la riña, por lo que los dos quedaron custodiados por los oficiales por haberse lesionado mutuamente.
Sin embargo, la Fiscalía General del Estado, a través del Agente del Ministerio Público, tuvo que abrir una carpeta de investigación para, precisamente, investigar los hechos y determinar qué fue lo que realmente sucedió.