AGUASCALIENTES, AGS.- Oficiales de la Policía Municipal prácticamente le salvaron la vida a un bebé de solamente un mes de nacido que presentaba problemas para respirar tras haber inhalado gas pimienta que fue arrojado durante una riña en una fiesta en un salón, ya que lo trasladaron de urgencia al Hospital Miguel Hidalgo para que fuera atendido.
Los hechos ocurrieron en el salón Ciprés, localizado en la avenida Ayuntamiento, en la colonia Obraje.
La joven Liliana “N”, de 21 años, acudió a dicho sitio con su bebé para asistir a un festejo familiar, pero durante el evento se inició una riña entre varios de los asistentes.
Durante la pelea, uno de los rijosos sacó un gas pimienta y lo arrojó a sus contrincantes, por lo que éste fue inhalado por el pequeñito, que empezó a tener problemas para respirar.
Al darse cuenta de lo anterior, su joven madre lo sacó del salón y al ver que se encontraba inconsciente trató de abordar un taxi para llevarlo a un nosocomio para su atención, pero no encontró ninguno, por lo que solicitó ayuda a los servicios de emergencia.
El primero que llegó al sitio fue el oficial Rangel Salado a bordo de la patrulla 0107 de la Policía Preventiva, que entrevistó a Liliana y ella le explicó lo sucedido, comentándole que su bebé no reaccionaba.
Ante esto, el uniformado los abordó a su unidad y los trasladó al nosocomio de la calle Galeana, donde a su arribo el bebé fue auxiliado de inmediato ya que sufrió los efectos del gas pimienta, aunque los galenos finalmente lograron salvarlo.