AGUASCALIENTES, AGS.- Una joven decidió ponerle fin a su existencia y por lo cual se provocó unas heridas en los brazos para desangrarse, pero finalmente se arrepintió y pidió ayuda a los servicios de emergencia, que la auxiliaron sin que fuera necesario trasladarla a ningún hospital.
La frustrada y arrepentida suicida dijo llamarse San Juana Valenciano, de 23 años de edad y vecina de la calle Agave del fraccionamiento Los Laureles, al oriente de la ciudad.
La tarde del viernes 13 de abril, aprovechando que estaba sola en su casa, de pronto decidió que ya no valía la pena vivir y por lo cual tomó un arma blanca para cortarse las venas de ambos brazos.
Sin embargo, se asustó al ver la cantidad de sangre que estaba perdiendo, por lo que ella misma llamó a los servicios de emergencia para solicitar auxilio.
Instantes después a la vivienda arribaron los técnicos en urgencias médicas, que la revisaron y le practicaron algunas curaciones, cubriéndole las heridas que se ocasionó, determinando que no ameritaba ser llevada a un hospital.
La joven les confesó que había intentado suicidarse, pero no les reveló los motivos por los que quería hacerlo.