Por: Georgina García Lucio
AGUASCALIENTES, AGS.- Tal parece que la obesidad se ha normalizado en nuestro país, pues el favorecer el consumo de alimentos altos en grasas y calorías ha provocado un alto índice de este padecimiento, provocando consecuencias mortales a mediano y largo plazo, pues según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, se estima que en el 2030 el 40 por ciento de los adultos mexicanos tendrán obesidad, por lo que esta condición ya es considerada una epidemia.
Un dato alarmante es la obesidad en los menores, pues el 32 por ciento de los niños entre 5 y 11 años tiene problemas de sobrepeso y obesidad, siendo esto una bomba de tiempo, pues esto resultará en enfermedades crónicas como diabetes y enfermedades del corazón, las cuales representan 7 de cada 10 de las principales causas de muerte.
Así de grave y mortal es la condición que a muchos mexicanos les provoca gracia, pero que, sin embargo, tiene en alerta a las autoridades, pues en un futuro el sistema de salud será insuficiente para atender los padecimientos que la obesidad genere.
Según la endocrinóloga Alejandra Ramírez Ruvalcaba, especialista en tratar la obesidad infantil, indica que además de una alimentación inadecuada alta en grasas y carbohidratos, el estilo de vida ha favorecido a que este padecimiento se incremente entre los niños, pues en promedio pasan cuatro horas cada día viendo la televisión o algún dispositivo electrónico y a medida que las computadoras y video juegos se vuelven más populares, la cantidad de horas de inactividad puede aumentar.
Al respecto el director del Instituto de Educación de Aguascalientes, Raúl Silva Pérezchica, informó que para fomentar la actividad entre los escolares se promueve la educación física de manera formal, pues a partir del primero de febrero se tendrá una cobertura del 100 por ciento en las escuelas de preescolar, primaria y secundaria, además de fomentar la actividad a la hora del recreo.
Sin embargo, este esfuerzo sólo es una mínima parte cuando los hábitos alimenticios entre las familias no son los adecuados, pues el funcionario refiere que aunque en coordinación con la Dirección de Salud se regulan los alimentos que se venden en las tiendas escolares, para las madres resulta más práctico comprar una gordita en el puesto de al lado que procurar un menú balanceado para el niño.
La obesidad infantil, además de los problemas de salud que generará, los niños pueden tener consecuencias a nivel social y emocional como los es baja autoestima, problemas de comportamiento y hasta depresión, por lo que la recomendación es tomar medidas preventivas, acudir al médico que determinará la situación del pequeño y adquirir hábitos saludables de alimentación y actividad física, de llevarlo a cabo, puede estar tranquilo que estará formando un futuro adulto que gozara de buena salud.