AGUASCALIENTES, AGS.- Lamentable tragedia ocurrió en la colonia Vicente Guerrero, al sur de la capital, donde un pequeñito de 3 años de edad murió luego de que le cayó encima un motor de un vehículo que su papá iba a reparar y le fracturó la cabeza.
Sus progenitores, en un intento por salvarlo, pidieron ayuda y a bordo de una ambulancia fue llevado a una clínica particular, donde se confirmó su deceso.
El niño fue hijo de José “N” y Alondra “N”, de 22 años de edad, con domicilio en la calle Camilo López de la mencionada colonia Vicente Guerrero.
Los trágicos hechos ocurrieron el jueves 28 de marzo, alrededor de las diez de la mañana con diez minutos, en la citada zona habitacional.
José se encontraba en un taller mecánico y se disponía a arreglar un motor de un vehículo, al parecer de un camión, por lo que comenzó a subirlo con ayuda de una pluma.
Sin embargo, de pronto se vino abajo y le cayó encima al pequeño, que estaba jugando cerca, y lo golpeó fuertemente en la cabeza.
Al verlo inconsciente, José lo levantó y junto con su esposa Alondra fue en busca de ayuda.
En la avenida Convención y la calle Gerardo Murillo del fraccionamiento José López Portillo se encontraron a policías preventivos de la patrulla 0819-B1 del Destacamento Insurgentes, por lo que les explicaron lo sucedido.
Los oficiales solicitaron la intervención de paramédicos e instantes después arribaron del ISSEA en la ambulancia ECO-420, que se encargaron de trasladar al niño y a sus padres a la clínica particular Santa Fe.
El menor fue recibido por el doctor Jaime Ruiz Escobar, que lo revisó y constató que ya había muerto, por lo que así se los hizo saber a sus papás así como a los policías municipales y a los paramédicos.
Posteriormente, a la clínica llegaron elementos de la Dirección General de Investigación Pericial, que trasladaron el cuerpo del niño al Servicio Médico Forense, donde se le practicó la necropsia y se estableció que murió de una hemorragia y edema cerebral y traumatismo craneoencefálico severo con fractura de cráneo producto del fuerte golpe que recibió con el motor.