AGUASCALIENTES, AGS.- La banda de asaltantes especializados en Rolex volvió a incursionar en Aguascalientes y durante el viernes 22 de noviembre, en poco más de una hora, consumó dos robos con violencia y se apoderó de cuatro relojes y dinero en efectivo.
El primero de los asaltos ocurrió alrededor de las dos y media de la tarde, en la avenida Eugenio Garza Sada, en el fraccionamiento Campestre Santa María, justo frente al Colegio Entorno.
Un hombre y su esposa, a bordo de una camioneta Mercedes Benz, en color azul, se trasladó a dicho plantel para recoger a sus hijas, pero fueron interceptados por un sujeto chaparro, moreno, con barba de candado y que vestía todo de negro, que los amagó con un arma de fuego.
El pistolero le ordenó al varón que le entregara los relojes, por lo que le dio el suyo y el de su esposa, estimados en 220 mil pesos, además de que también le quitó 12 mil pesos en efectivo.
Tras lo anterior, el delincuente corrió hacia Los Pocitos, mientras que los ofendidos se dirigieron a las avenidas Aguascalientes y Guadalupe González, donde reportaron los hechos a las autoridades.
Por lo anterior, se movilizaron policías de diferentes corporaciones, pero no lograron ubicar al hampón.
El segundo asalto tuvo lugar alrededor de las cuatro de la tarde afuera de una tienda Oxxo ubicada en las avenidas Héroe de Nacozari y Convención Sur y las víctimas resultaron ser dos empresarios de Guadalajara, Jalisco.
Los agraviados llegaron a dicho negocio y repentinamente fueron abordados por un sujeto robusto y con acento colombiano, que los amenazó con un arma de fuego y los despojó de sus relojes Rolex, con un valor de 200 mil pesos cada uno.
Enseguida, el ladrón se retiró y abordó una camioneta Chevrolet Tahoe, en color perla, en la que lo esperaba otro sujeto, y huyeron hacia la colonia Ojo de Agua.
Los empresarios tapatíos reportaron el asalto sufrido y nuevamente se movilizaron policías, pero no ubicaron a los responsables.
Agentes ministeriales iniciaron las investigaciones de ambos robos y lograron conocer que los delincuentes detectaron a sus víctimas en un par de restaurantes al norte de la ciudad, a los esposos en uno de la avenida Independencia y a los empresarios en otro del boulevard Luis Donaldo Colosio, debido a que aparecieron en las grabaciones de las cámaras de vigilancia y fueron identificados por los ofendidos.