AGUASCALIENTES, AGS.- Tres sujetos que en febrero del 2020 “levantaron” a un hombre, lo torturaron durante dos días en una casa de seguridad y finalmente lo ejecutaron de un balazo en la cabeza en un sitio en despoblado, fueron sentenciados, cada uno, a 80 años de prisión tras ser hallados penalmente responsables por el delito de secuestro.
Los acusados son Luis Alberto Mejía Chávez alias “El Cone”, Juan Carlos Luévano Gómez alias “El E.T.” y Mario Iván Ramírez Paredes alias “La Rana”, que privaron de la vida a Javier, que era conocido como “El Pipo”.
El lunes 17 de febrero del año pasado, entre las 20:00 y las 21:00 horas, “El E.T.” y “La Rana” interceptaron a la víctima en las inmediaciones del fraccionamiento Villa Las Palmas, al oriente de la ciudad, y la golpearon para someterla.
Enseguida, la llevaron a una casa de seguridad ubicada en la calle Villa Laura del fraccionamiento Villa Las Palmas III, donde se encontraron con “El Cone”.
Luis Alberto le dijo a Javier que eso le estaba pasando (el “levantón” y los golpes) por haber denunciado ante la autoridad una agresión previa que había sufrido.
Los tres sujetos estuvieron golpeándolo con pies y puños en la cara y el cuerpo, ocasionándole diversas lesiones.
“El Pipo” estuvo privado de su libertad durante los siguientes dos días y el miércoles 19 de febrero, a las 04:30 horas, otro sujeto y Juan Carlos lo sacaron del domicilio y lo subieron a un auto Nissan Tsuru rojo y con placas locales, en el que lo llevaron a un predio ubicado a un kilómetro al norte de la antigua carretera a San Luis Potosí, en la comunidad Norias de Paso Hondo, donde “El E.T.” lo ejecutó de un balazo en la cabeza entre las 05:30 y las 06:00 horas para luego darse a la fuga.
Tras el hallazgo del cadáver de Javier, las autoridades ministeriales realizaron las investigaciones correspondientes y lograron identificar a Luis Alberto, Mario Iván y Juan Carlos como los que lo privaron de su libertad, lo golpearon y finalmente lo ejecutaron.
Los tres fueron detenidos y sometidos a un proceso penal, al final del cual se les sentenció a cada uno a 80 años de cárcel por el delito de secuestro.
Además, fueron condenados al pago de 12 mil días de multa, equivalentes a 1 millón 42 mil 560 pesos, al pago de 616 mil 100 pesos por concepto de indemnización a favor de los familiares de la víctima así como a la reparación del daño a favor de los familiares del occiso consistentes en sesiones psicológicas.