* Se ahorcaron dos jóvenes; un policía estatal estuvo a punto de protagonizar el noveno

AGUASCALIENTES, AGS.- En las últimas horas quedaron al descubierto los suicidios 7 y 8 del año luego de que dos jóvenes se ahorcaron, uno en su casa en la colonia Insurgentes, y el otro en un stand de la Feria de San Marcos donde trabajaba como velador.

Además, un policía estatal estuvo a punto de convertirse en el noveno al intentar suicidarse intoxicándose con unas pastillas, pero logró sobrevivir.

El caso número 7 tuvo lugar en una vivienda ubicada en la calle Luis Moya de la colonia Insurgentes, donde se quitó la vida Miguel Ángel Bustos, que contaba con 18 años de edad y era adicto a las drogas.

Previamente, estuvo pepenando junto con su madre Verónica Bustos Nava, con la que tuvo una fuerte 07_61_01_510_SUICIDIOS 7 Y 8 INSURGENTES Y EXPO-PLAZAdiscusión, por lo que al llegar a su casa se encerró en una recámara, donde se ahorcó con un cable de luz que ató a una vigueta.

Alrededor de las 01:50 horas del martes 20 de enero, Verónica escuchó que se quebraba un vidrio, por lo que fue al cuarto de su hijo a ver qué sucedía y lo encontró suspendido, procediendo a bajarlo para luego pedir ayuda a los servicios de emergencia, pero al llegar le notificaron que ya había fallecido.

El suicidio 8 fue consumado por Adán López Medina, que contaba con 29 años de edad, en un stand de vinos ubicado en la calle Rincón y la avenida Adolfo López Mateos, frente a la Plaza Monumental de Toros, en el perímetro de la Feria de San Marcos.

El joven laboraba en dicho sitio como velador y fue encontrado sin vida también el martes, alrededor de las seis de la tarde.

Estaba casado con Jazmín Hernández Gómez, de 26 años, quien tenía 15 días de no verlo, por lo que fue a buscarlo, pero al llamar a la puerta no tuvo respuesta.

Por lo anterior, a un adolescente de 13 años de edad que paseaba en una patineta le pidió que se brincara para que le abriera la puerta, pero cuando ingresó descubrió al joven velador suspendido y en estado de putrefacción.

El adolescente le abrió la puerta a Jazmín, que ingresó y vio a su esposo colgado en un cuarto de la parte superior del stand, con un cable eléctrico negro y un cinturón, que amarró a un tubo de metal que sostenía el techo de lámina, observándole que le salían gusanos por los ojos y la boca, además de que tenía los labios amoratados.

La joven salió y pidió ayuda a los servicios de emergencia, trasladándose al lugar policías preventivos en las patrullas 0099, 0109 y 0387, así como paramédicos de la Cruz Roja en la ambulancia 18, que confirmaron que el velador tenía entre 5 y 8 días de haber fallecido.

Jazmín dijo a los elementos que ella trabajaba fuera de la ciudad y que por esa razón tenía 15 días sin ver a su esposo, pero que desconocía las razones por las que se suicidó.

Por otro lado, el oficial de la Policía Estatal Javier López González, de 33 años de edad, estuvo a punto de consumar el suicidio 9 del año, ya que se provocó una intoxicación al ingerir una gran cantidad de pastillas en el interior de su domicilio en el privada Cerrada Laurel del fraccionamiento Loma Dorada, también el martes alrededor de las dos de la tarde con cuarenta minutos.

Hasta el momento se desconocen las razones por las que el elemento atentó contra su existencia, aunque al empezar a sentirse mal por la intoxicación le pidió ayuda a uno de sus vecinos, que a bordo de su camioneta Chevrolet Safari, en color blanco, lo llevó a recibir atención al Hospital 2 del Seguro Social.

La patrulla 0514 de la Policía Preventiva escoltó a dicha camioneta para que llegara pronto al nosocomio, a donde luego arribó la unidad AG-077 de la Policía Estatal, cuyos elementos tratarían de investigar las razones por las que su compañero intentó suicidarse intoxicándose.

Noticiero El Circo