AGUASCALIENTES, AGS.- El Juez Cuarto Penal dictó una sentencia condenatoria de solamente 2 años de prisión para el agente de la Policía Ministerial que en estado de ebriedad “reventó” un domicilio en el fraccionamiento Jesús Terán junto con un amigo y que entre los dos golpearon a 10 personas.
El juzgador lo encontró culpable por el delito de ejercicio indebido del servicio público y además de tal pena lo condenó al pago de 3 mil 332 pesos como multa y lo inhabilitó por un año para desempeñar cualquier cargo público.
El elemento de la PME sentenciado fue identificado como Walter Daniel Martínez, que estaba asignado al Grupo Anti-Robos y tenía varios años de antigüedad en la corporación.
Los hechos que se le imputan ocurrieron el domingo 8 de febrero de este año en la finca marcada con el número 103 de la calle Tabachín del citado fraccionamiento Jesús Terán.
Durante la madrugada de ese día, el agente y su amigo estuvieron consumiendo bebidas embriagantes y prácticamente al amanecer pasaron por el domicilio señalado.
El acompañante del agente le indicó que esa casa era un “picadero”, es decir, un lugar donde se venden y consumen drogas, por lo que Walter Daniel decidió “reventarla” para “quedar bien con sus superiores”.
De manera violenta, el ministerial y su amigo irrumpieron en la vivienda, donde en esos momentos se encontraban nueve individuos y una mujer, a los cuales tomaron por sorpresa.
Uno de los hombres era tatuado en su cuerpo y se hizo acompañar de la fémina, que era su novia.
Los intrusos dijeron ser de la (desaparecida) Policía Judicial y a Walter Daniel le observaron un arma de fuego corta, que resultó ser la de cargo.
El agente y su amigo comenzaron a golpear a todos los sujetos así como a la mujer, a quienes les exigían que les entregaran la droga que tuvieran, pero éstos les respondieron que no había nada de eso en la casa.
Las agresiones fueron constantes e incluso a uno de los individuos, Walter Daniel estuvo a punto de sacarle un ojo a golpes ya que, al parecer, lo identificaba como agente ministerial.
Vecinos del lugar escucharon el escándalo en el domicilio y dieron aviso a los servicios de emergencia, por lo que al lugar acudieron policías preventivos, que sorprendieron a Walter Daniel y a su amigo cuando salían del inmueble.
Al ver a los oficiales, el agente de la PME les pidió que le ayudaran a “reventar” el domicilio porque ahí vendían y consumían drogas, pero los oficiales se dieron cuenta que se hallaba en estado de ebriedad y llamaron a la Policía Ministerial, donde les indicaron que no estaban llevando a cabo ningún operativo en esos momentos.
Otros agentes ministeriales se trasladaron al sitio y confirmaron que su compañero estaba ebrio, por lo que ingresaron a la casa y encontraron a los nueve hombres y a la mujer golpeados, señalando a Walter Daniel y a su amigo como los que los agredieron, por lo que procedieron a su arresto.
Los diez ofendidos fueron llevados a la Dirección de Averiguaciones Previas para rendir su declaración correspondiente e interponer la denuncia por las agresiones de las que fueron objeto, por lo que Walter Daniel y su amigo fueron presentados ante el Ministerio Público.
El domicilio fue revisado ya de manera legal y se confirmó que efectivamente no había drogas.
El Fiscal integró una averiguación previa en contra del agente ministerial por los delitos de allanamiento de morada, ya que se metió sin permiso al domicilio, lesiones dolosas, por haber golpeado a las diez víctimas, y ejercicio indebido del servicio público, porque “reventó” la casa sin estar trabajando y al hallarse en estado de ebriedad.
Por tal motivo, se le envió al CERESO junto con su amigo y ambos quedaron a disposición del juez penal, que a Walter Daniel le negó el beneficio de la libertad bajo caución ya que el delito de ejercicio indebido del servicio público está considerado como grave y tras un proceso finalmente lo sentenció a 2 años de cárcel.