- El diputado federal advierte sobre la pérdida de autonomía del Distrito de Riego 01 y denuncia un rezago de más de 115 mil trámites en la CONAGUA
AGUASCALIENTES, AGS.- En el marco del foro de discusión sobre la Ley General de Aguas realizado en la Confederación Nacional Campesina (CNC), el diputado federal por el Distrito 03, Paulo Martínez López, lanzó una severa advertencia sobre la nueva iniciativa de reforma, asegurando que ésta busca centralizar el control del agua para convertirla en una herramienta de coacción política.
Previo al inicio del evento, el legislador panista y secretario de la Comisión de Recursos Hidráulicos en la Cámara de Diputados, señaló que la propuesta actual genera una profunda incertidumbre jurídica no sólo en el sector agropecuario, sino también en la industria y los organismos operadores municipales.
Al ser cuestionado sobre si se está conformando una “mafia del agua” similar al “huachicol fiscal”, Martínez López fue contundente al afirmar que el recurso hídrico corre el riesgo de volverse un “botín político”.
“Estás a favor del oficialismo, estás a favor del gobierno federal, te dan agua; no estás a favor, no te dan agua. Así de simple”, sentenció el diputado, alertando sobre la discrecionalidad que otorgaría la nueva ley.
El desmantelamiento del Distrito de Riego 01
Uno de los puntos más críticos para la entidad es el impacto en el Distrito de Riego 01, considerado un modelo a nivel nacional.
Según Martínez, la reforma les quitaría “toda libertad de operación directa”, convirtiendo a los socios y usuarios en simples entes administrativos de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA).
“Les quitan su administración interna, su control interno y su patrimonio. Pasan a ser un organismo más de CONAGUA sin capacidad de toma de decisiones”, explicó, advirtiendo que esto afectaría tanto a unidades de riego como a pozos comunitarios.
El legislador denunció que la propia CONAGUA es quien ha provocado la crisis actual, citando un rezago de más de 115 mil trámites en espera a nivel nacional.
Acusó al organismo de haber desmantelado las estructuras estatales, lo que ha derivado en la problemática que hoy intentan resolver con una ley que calificó de centralista.
Martínez López adelantó que el oficialismo (Morena, PT y Verde) pretende acelerar el proceso legislativo.
Se espera que la próxima semana se analice el dictamen en la comisión para ser votado en el pleno de la Cámara de Diputados entre el 2 y 3 de diciembre.
“Si la mandan tal cual como está va a ser un gran problema, una crisis a nivel nacional y una parálisis en muchos sectores”, advirtió, lamentando que la mayoría de los legisladores oficialistas actúen bajo indicación sin escuchar el reclamo del 90% de los participantes en las mesas de diálogo, quienes exigen regulación sin pérdida de derechos.
El foro celebrado en la sede de la CNC tuvo como objetivo informar a los sectores productivos y buscar puntos de acuerdo para frenar los aspectos más lesivos de la iniciativa antes de su inminente votación.