LAGOS DE MORENO, JAL.- Agentes de la Policía de Investigación lograron la recaptura del interno acusado por el delito de secuestro que se fugó de Puente Grande con documentación judicial falsa ayudado por una cómplice dentro del penal.
Además, se logró la detención de la probable implicada en este delito.
El operativo que permitió su arresto tuvo lugar la noche del sábado 5 de marzo en Lagos de Moreno y fue reconocido por el propio gobernador del Estado, Enrique Alfaro.
En su página de Facebook publicó “todo mi reconocimiento a la Fiscalía del Estado de Jalisco por lograr las dos capturas en Lagos de Moreno gracias a los operativos de inteligencia y búsqueda. El paso más importante está hecho, pero aquí no termina la investigación. Seguiremos informando…”.
LA FUGA
La Fiscalía Estatal inició una investigación por la fuga de una persona privada de la libertad en un centro de reinserción social en la entidad.
El ahora prófugo estaba involucrado, junto con otros sujetos, en el caso de la desaparición forzada de 6 jóvenes en el mes de julio del 2013 en Lagos de Moreno.
El martes 21 de diciembre del 2021, mediante documentos falsos se simuló la libertad del sujeto mediante una sentencia absolutoria apócrifa a favor de José Guadalupe “N” alias “El Ávila”, quien se encontraba bajo proceso por el delito de secuestro agravado.
Es así que el jueves 3 de febrero del 2022 la jueza de primera instancia con sede en Lagos de Moreno ordenó la excarcelación del sujeto para realizar una diligencia, pero fue entonces que el equipo de reinserción social se percató que dicha persona ya había sido puesta en libertad.
Inmediatamente, Reinserción Social contactó al Consejo de la Judicatura para verificar la documentación obtenida.
Posteriormente, con la información que cotejaron las autoridades, se concluyó que la persona no debió ser puesta en libertad.
Luego de conocer el hecho, el órgano jurisdiccional giró la orden de reaprehensión en contra del evadido.
La Fiscalía del Estado inició las investigaciones de los hechos denunciados, recabando diversos datos de prueba, entre ellos los peritajes grafoscópicos, que arrojaron como resultado que las firmas de la jueza y el secretario del juzgado fueron falsificadas.