Jesús María, Ags.- Juan Camilo Meza, rector de la Universidad Cuauhtémoc de Aguascalientes (UCA), habló sobre el camino que ha recorrido México en su combate a las drogas. Para el colombiano, “aún no toca fondo”, como si lo hizo su país en los 90 ahogado por la sed de poder y ambición de Pablo Escobar Gaviria desde Medellín, ciudad que también vio nacer a la máxima autoridad de la UCA.
Para Meza, su ciudad natal puede ser ejemplo para México. “Se puede reproducir lo que pasó en Medellín en México. Mira, yo llevo 20 años acá. Y desde que llegué, por ejemplo a Aguascalientes, obviamente las cosas han cambiado.” Para el catedrático, nuestro país hizo caso omiso a las advertencias que le indicaban estaba siguiendo el camino del modelo Colombia. Un modelo que hizo de Medellín ser catalogada como la ciudad más violenta del mundo en los 90.
Colombia tocó fondo, asegura Meza. Y cuando eso pasa, dice, “lo que tienes que hacer es levantarte o morirte. Colombia se levantó, Medellín se levantó.” Tanto, que el año pasado fue galardonada como la ciudad más innovadora del mundo “por encima de Tel-Aviv y Nueva York.”
El rector de la UCA explica que ese cambio lento y radical se dio, en gran parte, a los empresarios antioqueños. “Nadie se fue, todos creyeron”, explica. El gran ejemplo fue la determinada acción que tomaron para eliminar el secuestro tan común y corriente en alguna época. Meza cuenta que “le pidieron al gobierno que si les secuestraban a un familiar, les congelaran las cuentas de banco para no tener la tentación de pagar el rescate. Claro, fue duro, mataron dos o tres hijos de empresarios. Hoy Medellín lleva 8 o 9 años sin un solo secuestro.”
La solución, dice Meza, es comprometerse desde todos los ámbitos. “México está lejos de tocar fondo. Mira, yo viví en los 90 en Medellín. Nosotros no podíamos salir después de las 9 de la noche porque había toque de queda. Vi lo que era todas las noches un coche bomba, misiles, etc. Era una zona de guerra. Creo que estamos lejos de eso.”
Debe México aprender del modelo Colombia, “no hay que repetir lo malo.” El tema primordial es la familia, señala Meza. “Si tú logras inculcar en tu familia la capacidad de tomar decisiones, de resolver problemas y asumir riesgos, seguramente sí irán de fiesta y se tomarán una chela, pero aun así, decidirán por ejemplo no manejar si están borrachos.”
Lo mismo pasa con las drogas, dice. Meza lamenta que “si la familia cree que porque pagan una colegiatura, la escuela ayudará a prevenirlo de las drogas está muy equivocada. Es un tema que se tiene que abordar desde todos lados