AGUASCALIENTES, AGS.- Uno de los “balconeros” que mataron a golpes al reincidente delincuente conocido como “El Huevo” debido a que se metió a robar en varias ocasiones a una bodega de su propiedad en la colonia Las Cumbres, al oriente de la ciudad, salió del CERESO tras obtener un beneficio de libertad condicionada.

Se trata de Kenin Rodríguez Pacheco, que desde el jueves 20 de febrero abandonó la cárcel y pudo regresar con su familia, aunque todavía tendrá que acudir periódicamente a firmar al Juzgado debido a que aún no termina de cumplir su sentencia de 4 años de prisión que le había sido dictada por el delito de homicidio simple intencional.

Los otros dos acusados, su hermano Francisco Javier Rodríguez Pacheco y su amigo Manuel “N”, todavía continúan presos, pero su defensa confía en que durante las próximas semanas también puedan ser liberados.

Los tres, al hacerse justicia por su propia mano, acabaron con la vida del delincuente “El Huevo”, Hugo Luján Ramírez, que tuvo 195 ingresos a la Dirección de Justicia Municipal por diferentes delitos y faltas administrativas, principalmente por robo.

Los hechos ocurrieron el miércoles 3 de mayo del 2017, minutos después de las nueve de la mañana, en la finca marcada con el número 135 de la calle Sierra de Nacozari, casi esquina con la avenida Siglo XXI, en la colonia Las Cumbres.

En ese sitio anteriormente funcionó una balconería, pero su propietario falleció y la finca quedó habilitada como bodega.

“El Huevo” aprovechó que el lugar se encontraba solo y, al menos, en dos ocasiones se metió a robar.

Una hija del que había sido dueño de la balconería se dio cuenta de los hurtos y decidió denunciar al delincuente en la Fiscalía General del Estado.

No obstante, de todos era sabido que “El Huevo”, cuando era detenido por cometer robos, de inmediato salía en libertad pese a ser denunciado.

Debido a esta situación, la hija del propietario del taller le pidió a uno de sus hijos que se fuera a vivir a la bodega para que la cuidara y evitar más saqueos, por lo que su vástago comenzó a acondicionar el lugar para habitarlo.

La mañana del miércoles mencionado, “El Huevo” llegó a la bodega y se introdujo a robar junto con un adolescente de 16 años de edad, por lo que el joven que ahí se encontraba le llamó a su hermano para pedirle ayuda y éste se trasladó al sitio junto con Manuel.

Al llegar, sorprendieron al delincuente dentro de la finca, por lo que se le fueron encima y comenzaron a golpearlo en diferentes partes del cuerpo, además de que le amarraron una cadena al cuello.

Los consanguíneos decidieron cobrarse los robos sufridos y al ver que “El Huevo” ya no se movía dieron aviso al servicio de emergencias 911.

Policías preventivos se trasladaron a la bodega al igual que paramédicos municipales, que revisaron al delincuente y confirmaron que ya había muerto, por lo que Francisco Javier, Kenin y Manuel fueron asegurados por los uniformados, al igual que el jovencito que acompañaba al fallecido.

El escenario de los hechos fue acordonado hasta que llegaron las autoridades ministeriales para realizar las diligencias respectivas y levantar el cuerpo del finado, que fue llevado al Servicio Médico Forense.

La necropsia reveló que el delincuente murió a causa de fuertes golpes en la cabeza, que le provocaron una hemorragia interna.

Los tres detenidos fueron llevados a la Fiscalía General del Estado y presentados ante el agente del Ministerio Público, pero posteriormente se les consignó ante el juez y se les recluyó en el CERESO Aguascalientes.

En diciembre del 2017, Francisco Javier, Kenin y Manuel se sujetaron a un procedimiento abreviado y fueron sentenciados, cada uno, a 4 años de prisión por homicidio simple intencional.

Recientemente, el abogado de los acusados promovió un incidente de pre-liberación a su favor debido a que ya habían cumplido poco más de la mitad de su sentencia y reunían otros requisitos para tal beneficio.

Durante el jueves 20 de febrero, en el Juzgado de Ejecución y Medidas de Seguridad se llevó a cabo una audiencia, en la que se determinó que Kenin podía ser pre-liberado con la condición de acudir a firmar periódicamente, por lo que abandonó el CERESO y regresó con su familia.

En el caso de Francisco Javier y Manuel, se espera que alcancen el mismo beneficio en unas cuantas semanas.

Noticiero El Circo