AGUASCALIENTES, AGS.- Inició ya el juicio a los malvivientes relacionados con el homicidio de la joven María del Cristal Acevedo Gómez, a quien en primera instancia pretendían asaltar, pero terminaron asesinando y luego incineraron sus restos en un horno donde preparaban banquetes.

Se trata de Roberto Carlos Galleos Martínez, de 42 años, alias “El Topo”; Marco Antonio Valdepeña Aguilar, de 42, apodado “El Gordo”; Gustavo Iván Ortiz Vargas, de 30, conocido como “El Sombra”; Manuel Cárdenas Martínez, de 32, “El Piojo”, y Guillermo Cervantes Valdepeña, “El Memo”.

El juez Cuarto Penal les dictó el auto de formal prisión por el delito de homicidio doloso calificado con las agravantes de premeditación, alevosía y ventaja, en agravio de la joven María del Cristal Acevedo Gómez, de 29 años de edad, con último domicilio en el Infonavit Pirules.

La denuncia de desaparición de la víctima se llevó a cabo el 27 de julio del año 2014, cuando familiares de la joven indicaron ante las autoridades ministeriales que había ido a trabajar, pero ya no había regresado a su domicilio, tras lo cual iniciaron las investigaciones.

Fue en el mes de junio del año en curso cuando recibieron el reporte de que un sujeto apodado “El Topo” tenía que ver con la desaparición de María Cristal, tras lo cual fue detenido en el Ejido los Negritos, en compañía de “El Gordo” y “El Sombra” en posesión de varios envoltorios con droga.

Al ser cuestionados, señalaron que el 26 de julio del 2014, estaban en un domicilio de la calle Galicia de la colonia España junto con “El Piojo” y “El Memo” consumiendo bebidas embriagantes y drogas, en determinado momento “El Sombra” y “El Piojo” salieron a robar a alguien en la avenida Aguascalientes, en determinado momento observaron a María del Cristal.

Al pasar junto a ellos “El Sombra” la tomó del cuello mientras la decía que era un asalto y que no gritara, por lo que le tapó la boca, mientras “El Piojo” la golpeaba, luego la llevaron a la casa donde estaban sus amigos en la calle Galicia.

Ahí la joven comenzó a gritar pidiendo ayuda, lo que generó que fuera apuñalada en el abdomen por “El Piojo”, una vez que murió, estos sujetos decidieron arrojar sus restos a un horno, esperaron por seis horas tomando y drogándose para luego tirar los restos a la alcantarilla.

“El Piojo” y “El Sombra” se fueron a su casa, mientras el resto seguía la parranda, sería hasta un año después que la autoridad lograría encontrar los elementos suficientes para detenerlos y trasladarlos a las instalaciones del penal estatal.

Noticiero El Circo