FRESNILLO, ZAC.- Un oficial de la Policía Municipal fue ejecutado a balazos al tratar de impedir que sujetos armados “levantaran” a su esposa, que trabaja como guardia de seguridad privada en el Hospital General de Fresnillo, aunque finalmente se la llevaron privada de su libertad.
El ataque sucedió el miércoles 9 de febrero, minutos antes de las ocho de la mañana, sobre la avenida Enrique Estrada, en Fresnillo, aunque el policía preventivo murió hasta la noche a causa de los balazos recibidos.
El elemento de la Policía Municipal era conocido por sus compañeros como “Zorrillo”.
El oficial y su esposa salieron de su casa para ir a trabajar.
Ambos vivían casi frente a la corporación, a 100 metros de distancia.
Al salir de su domicilio fueron sorprendidos por unos sujetos armados, que tenían la firme intención de llevarse a su esposa.
Al percatarse de sus intenciones, el policía municipal salió en su defensa para tratar de evitar a toda costa que se la llevaran privada de su libertad.
El elemento forcejeó con los delincuentes, pero uno de ellos sacó a relucir un arma de fuego y le disparó a quemarropa, logrando herirlo en la cabeza y en el tórax, por lo que cayó al piso lesionado gravemente.
Tras lo anterior, los sujetos “levantaron” a su esposa y se la llevaron privada de su libertad.
Vecinos que fueron testigos de todo lo sucedieron dieron aviso a las autoridades a través de los servicios de emergencia.
Elementos de las corporaciones policíacas se trasladaron al lugar señalado y al llegar encontraron a un hombre herido de bala, identificándolo como oficial en activo de la Policía Municipal.
Por tal motivo, fue auxiliado y luego trasladado a recibir atención a un hospital.
Los policías fueron enterados que su compañero “Zorrillo” fue atacado por sujetos armados que “levantaron” a su esposa, por lo que desplegaron un operativo en busca de los agresores, pero no los localizaron ni tampoco a la cónyuge del elemento.
Al lugar de los hechos arribaron posteriormente agentes de la Policía de Investigación para dar inicio con la indagatoria respectiva y peritos del Instituto Zacatecano de Ciencias Forenses, que se encargaron de procesar la escena y recolectar la evidencia.
Lamentablemente, el policía municipal no logró sobrevivir a los balazos recibidos y falleció durante la noche del mismo miércoles, consumándose así el homicidio, por lo que su cuerpo fue trasladado al Instituto Zacatecano de Ciencias Forenses para la práctica de la necropsia de ley.