EN EL FRACC. SANTA ANITA

  • Se encontraba presenciando un partido del Torneo Nacional de Baloncesto U-15 varonil y al salir, le dispararon desde el interior de un auto

AGUASCALIENTES, AGS.- Durante el partido celebrado ayer en la tarde en el gimnasio de baloncesto “Hernández Girón” ubicado en el fraccionamiento Santa Anita, donde las quintetas representativas de Oaxaca y Baja California sostenían un encuentro, repentinamente se escuchó una serie de detonaciones en exterior y un jefe de familia, progenitor de uno de los jugadores, cayó herido de un impacto.
El lesionado fue identificado como José Eduardo Schobert González, de 39 años, con domicilio en Tijuana, Baja California, quien resultó herido de un balazo en un hombro pero al parecer no le penetró ya que solo fue un rozón por lo que no ameritó ser trasladado a ningún nosocomio.

De manera extraoficial se logró conocer que José Eduardo recibió una llamada telefónica a su celular y le indicaron que saliera del gimnasio.
Al salir, pasó un vehículo y desde el interior, uno de los ocupantes le disparó en al menos cinco ocasiones y enseguida se dieron a la fuga, mientras que el ofendido regresó al gimnasio y fue entonces que se solicitó el auxilio de los servicios de emergencia.
Los hechos se registraron alrededor de las 19 horas, cuando en el 911 se recibió el reporte de que el interior de las instalaciones del mencionado gimnasio, ubicado sobre la calle Siglo XIX y Canal Interceptor, en el citado fraccionamiento se habían escuchado balazos y al parecer había una persona lesionada.
De inmediato se trasladaron al lugar elementos de las diferentes corporaciones policiales y ambulancias de la Cruz Roja, cuyos paramédicos confirmaron que habían una persona del sexo masculino, lesionada por un disparo de arma de fuego, pero afortunadamente estaba fuera de peligro, gracias a que el proyectil no le penetró y no interesó órganos vitales.
Tras lo anterior, los elementos policiales cerraron las puertas de acceso para evitaron que los asistentes salieran del gimnasio, ya que presumían que los disparos se habían realizado en el interior.
Cabe mencionar que uno de los proyectiles disparados en contra de José Eduardo, al no hacer blanco en su humanidad, entró de rebote la gimnasio y eso provocó un tremendo caos.
Fue en el momento en que se había detenido el partido por un tiempo fuera solicitado por el entrenador de unos de los dos equipos, cuando de pronto se escucharon las detonaciones.
Decenas de asistentes que observaban el encuentro, comenzaron a correr en medio de la duela, tratando de ponerse a salvo, sin comprender en ese momento lo que estaba sucediendo, únicamente sabían que eran balazos los que habían escuchado.
Una vez que los técnicos en urgencias médicas ubicaron a la persona lesionada, que resultó ser el progenitor de uno de los adolescentes que participaban en el encuentro, de inmediato le brindaron las primeras atenciones y tras estabilizarlo, determinaron que no requerí de traslado.
Tras el fallido intento de ejecución, se implementó una impresionante operativo en el que participaron elementos de la diferentes corporaciones policiales, pero no lograron ubicar a los agresores.

Noticiero El Circo