DANTE DELGADO RANNAURO 
COORDINADOR NACIONAL  DE MOVIMIENTO CIUDADANO 
PRESENTE 
El presente escrito es para hacer de su conocimiento y solicitar su importante intervención, en el urgente y oportuno rescate de Movimiento Ciudadano en Aguascalientes, al transitar por graves momentos debido al apoderamiento de posiciones por sus actuales dirigentes y la imposición de criterios que nada tienen que ver con la lucha que usted encabeza para la transformación de México.

Debemos advertir, con el estricto sentido de la realidad, que ha resultado decepcionante y penoso el actuar  de Felipe González Ramírez como candidato a Presidente Municipal de Aguascalientes y quien es desde esta elección, la figura principal del Movimiento en nuestro Estado.  Nos ha confirmado que su única virtud es llamarse como  su padre, lo cual  en nada le ayuda.
Es triste ser testigos de una  pobre campaña, que a un mes de iniciado el tiempo de contienda, aún no la inicia  mostrando entre él junto con la dirigencia actitudes de apatía,  pereza e  ignorancia.
Qué decir sobre las decisiones, que han dejado mucho que desear como la de  imponer a Raúl Martínez Delgadillo al frente de la  Coordinación Estatal por quien hemos decidido hacer el presente manifiesto. Nos preocupa de sobre manera que esté en sus manos las  riendas del proyecto de Movimiento Ciudadano en Aguascalientes.
Ante la opinión pública, Raúl Martínez Delgadillo sólo ha dado muestra de poca humildad y demasiada avaricia.  Por ejemplo, ante la opinión pública indigna su aparición  en su auto Maserati, el cual tiene un valor de más de  un millón de pesos; además presume de sus viajes por todo el mundo y alardea de sus propiedades en Miami o en Texas, donde por cierto radica actualmente.   De lo que nunca podrá presumir es que todo eso lo ha obtenido con dinero limpio. Son crecientes los comentarios, que por cierto no ha desmentido, que en su haber  existen averiguaciones en Estados Unidos por presunto lavado de dinero y en México se ha visto involucrado en situaciones similares. 
Podríamos pasar en alto que Raúl Martínez Delgadillo es soberbio, prepotente y majadero, inclusive que presuma ser un buen abogado, aunque de política no sepa nada;    lo que verdaderamente  ofende y molesta  es que no tenga el más mínimo don de mando, carezca de liderazgo, desconozca las leyes electorales y nuestros estatutos y dirija tan desatinadamente este proyecto.
No sobra analizar que en esa experiencia que dice tener, y en este tiempo que lleva el proceso electoral se ha multado en dos ocasiones a Movimiento Ciudadano y se impidió el inicio puntual de la campaña de algunos candidatos por el desorden en la papelería.
Resulta reprobable  tener de coordinador a  un verdadero títere que nada resuelva y que la única respuesta que sabe dar es que lo va a comentar con  Felipe, sea cual sea la problemática.  Es preocupante tener una organización política que en plena  campaña tenga cerradas   las puertas de las  oficinas, que apague  sus teléfonos y no de la cara para resolver problemas; es también decepcionante que nuestro “líder”  prefiera ir a la coronación del kínder de su hija, que al presunto arranque de campaña de Felipe.
En nuestra lucha por terminar con la corrupción que se da en el gobierno, con el dispendio que hacen sus funcionarios públicos y la falta de transparencia en la administración de todos los órdenes,  nos enteramos que dentro de Movimiento Ciudadano tenemos como dirigente a un personaje que busca ser diputado sin apartarse de esas condiciones, que tanto rechaza la sociedad.
Es necesario que se someta a la rendición de cuentas bajo el esquema 3 de 3 y no sólo eso, que se le investigue para estar claros que no mentimos.
Queremos agregar que, ha sido muy decepcionante para nosotros enterarnos por los medios de comunicación, el resultado de diferentes encuestas sobre la intención del voto a favor de Movimiento Ciudadano, la cual nos ubica en el último lugar.
La invitación que nos fue formulada en su momento para el proceso era tan ambiciosa como creíble.  Sin embargo, al momento de las campañas nos encontramos con una serie de restricciones entre las que están la disponibilidad del presupuesto, la apertura y facilidad para exponer nuestras ideas como propuestas de gobierno y la unidad interna para convocar el voto a un proyecto que debiera ser común.
Consideramos que todo coincide en un problema: la falta de liderazgo en el mando.  De un líder que entienda que la política es inclusión entre las diferencias; que sea promotor del diálogo entre el disenso y muy importante, que sea  una persona honesta y sin antecedentes que puedan manchar el prestigio de todos los que pretendemos erradicar a los corruptos de nuestro sistema político.
Es por eso, que los firmantes de este documento,  estamos decididos a no trabajar para que una persona como Raúl Martínez Delgadillo, sin calidad moral ni capacidad para la representación ni el diálogo, llegue  por la vía más cómoda a  ocupar la primera diputación plurinominal.
Deseamos que nuestra dirigencia nacional entienda esta situación e intervenga de inmediato para la reivindicación de nuestra organización y la credibilidad de nuestro ejercicio, sería muy penoso tener que estar evidenciando cada una de las acciones de estos sujetos.

A T E N T A M E N T E:
Candidatos, militantes y simpatizantes

Noticiero El Circo