ASIENTOS, AGS.- A golpes, aparentemente batazos, un joven fue asesinado en el municipio de Asientos tras verse involucrado en una impresionante riña campal durante un partido de beisbol.

La gresca tuvo lugar la tarde del domingo 19 de abril y tras la pelea ya no se volvió a saber nada del hombre, hasta que la tarde del lunes 20 fue encontrado sin vida.

Las autoridades ministeriales iniciaron una investigación y habrían logrado detener a varios sujetos sospechosos, por lo que se esperaba que pronto pudieran ser identificados y arrestados los causantes de la muerte del joven.

El joven asesinado respondió al nombre de Luis Enrique Espinoza Ríos, contaba con 22 años de edad, era soltero, de ocupación albañil y tuvo su domicilio en la calle José María Pino Suárez en la comunidad Pino Suárez de dicho municipio.

Su madre Amelia Ríos Robledo, de 58 años, y su hermana Claudia Espinoza Ríos, de 28, relataron que Luis Enrique formaba parte de un equipo de beisbol de Pino Suárez, que el domingo sostuvo un partido con un equipo de Viuda Rancho, de la población de Molinos.

Entre los habitantes de ambas comunidades ya existían algunas rencillas.

El domingo, alrededor de las cuatro de la tarde, comenzaron un tercer juego de una serie en el campo de Pino Suárez, pero dos horas después llegaron varias personas a bordo de dos camionetas, entre ellas algunas mujeres, provenientes de Molinos e iniciaron la riña campal.

Los habitantes de los dos poblados comenzaron a agredirse con pies y puños, piedras, botellas y hasta con los bates de beisbol con los que estaban jugando, por lo que durante la pelea el joven Luis Enrique se echó a correr para ponerse a salvo.

No obstante, fue seguido por algunos de sus contrincantes, que le dieron alcance y lo agredieron brutalmente hasta causarle la muerte.

Tras la riña, todos los participantes se retiraron, por lo que los familiares del joven estuvieron esperando que regresara a su casa, pero no lo hizo.

Por tal motivo, comenzaron a buscarlo pero sin éxito. Incluso su mamá tenía la esperanza de que estuviera con unos amigos de la colonia Calles, pero no era así.

Durante el lunes, alrededor de la una de la tarde, un niño que cuidaba unas chivas cerca del campo de beisbol, encontró el cuerpo sin vida de Luis Enrique, por lo que de inmediato fue a avisarles a sus familiares, que a su vez notificaron a las autoridades.

Al lugar acudieron policías preventivos y estatales y luego ministeriales para iniciar las pesquisas correspondientes, verificando que el cuerpo del joven ya estaba rígido, por lo que presumieron que murió durante la tarde-noche del mismo domingo, tras la riña, y por haber pasado tantas horas a la intemperie quedó en esas condiciones.

Se presumió que murió por los golpes que recibió en diferentes partes del cuerpo, principalmente en la cabeza, al parecer con los bates de beisbol.

El agente del Ministerio Público dio fe de la muerte del joven y peritos de Servicios Periciales levantaron el cuerpo y lo trasladaron al SEMEFO.

Agentes del Grupo Homicidios lograron conocer que el joven participó en una riña durante un juego de beisbol y que sus rivales eran de Molinos, por lo que se trasladaron a esta comunidad y detuvieron a varios sujetos para tratar de identificar a los que lo asesinaron.

Noticiero El Circo