• Nueva carta para Carlos Lozano fue enviada a la redacción de Noticiero “El Circo”…

Estimado Carlos:

Me había propuesto no volver a escribirte, y menos porque ya te encuentras en la recta final de tu administración, que sin duda deberá ser juzgada por la historia por lo que hiciste, pero sobre todo por lo que dejaste de hacer.

Pero son los resultados de las pasadas elecciones que no dejan de atormentarnos como priistas que alguna vez conocimos lo que era tener el carro completo o al menos las posiciones estratégicas dentro de la política.  Contigo ha sido imposible para el PRI volver a sus mejores tiempos y  cada vez crece más  la amenaza de perder la gubernatura el próximo año.

Qué épocas aquéllas en las que participábamos en un PRI acostumbrado a las victorias luego de  dar espacio a  todas las corrientes del partido. Con dirigentes que lograban limar asperezas compartiendo los beneficios del poder.

Como lo he dicho en mis anteriores cartas, a ti te gana la intolerancia y  la soberbia y lo demuestras en tus actos. En el antiguo PRI sí que había siempre un  equilibrio entre la dirigencia del partido y el gobernador en turno. Recuerda incluso la lucha interna que se dio en la época de Otto y Barberena. Si bien no eras bien visto por ellos, nunca te dieron la espalda y dejaron que crecieras.

Estamos a un año de elegir a tu sucesor lo  cual debes ver como tu mejor acierto o tu mayor fracaso. Como tu aliado o tú verdugo;  si no, pregúntale a Luis Armando a ver  si él te puede confirmar que  en política no hay agradecimiento.

Hoy tenemos  un partido fuerte únicamente porque somos gobierno, pero no existe unidad y no se toma en cuenta a su militancia. Un PRI dirigido por un muchachillo  empeñado en controlar las riendas sin tenerlas en la mano por la falta de experiencia.

No te aferres a que Lorena Martínez no sea la candidata del PRI a la gubernatura.  Ya han sido muchas faltas de respeto que has tenido hacia ella. Como tú en su momento, debe encontrar las puertas abiertas para llegar a esa posición en un escenario que nos una y no nos siga dividiendo.

En el PRI no vemos a otra persona con más posibilidades que ella. Te equivocas al suponer que  Miguel Romo, tu esposa Blanca, tus incondicionales Paco Chávez y Alejandro Alba cuentan con el capital político suficiente para dirigir a Aguascalientes.

A  Lorena no le has dado su lugar y le molesta que le mandes a los eventos a tu hijo José Carlos sólo para sacarse la foto. Coincidimos con ella que esas decisiones caen muy mal. Insisto, tú eres quien debe darle su lugar.

Deja que todos los priistas definamos  las candidaturas. No generes expectativas en personajes que crees te serán obedientes. Recuerda que los que dejan al rey errar a sabiendas, merecen pena como traidores.

Tienes depositada tu confianza en personajes que ayer ondeaban orgullosos las banderas del PAN y hoy se dicen priistas de hueso colorado dirigiendo los destinos de nuestro partido y hasta aprobándote leyes.

Siempre te advertí que Javier Aguilera no servía y mira te traicionó; pero aun así lo premiarás con una notaría.  Recuerda además del daño que causan a tu administración las asesorías de Carlos Penna, un infumable funcionario público.  Si no crees, pregúntale a los Rivas que  trato les han dado.  Seguro esa factura te la cobrarán luego de que dejes de ser gobernador.

Al  menos, en estas elecciones ya no te hizo daño  Felipe Muñoz.  No insistas en tener  a su sucesor en la Fiscalía. Te generará un mayor desgaste y seguramente se reflejará en las próximas elecciones. Propón a alguien neutro, que trabaje con imparcialidad.

Has confiado demasiado en tu sobrino Alejandro para el manejo de las finanzas y no ha sido todo  tan sano como presumen. Ya tuviste un aviso de lo que puede suceder: la PGR intervino y encarceló  a una de tus funcionarias por actos de corrupción.  De nada sirvió el enroque que habías hecho al pretenderle protección en  la Jefatura de Gabinete. ¿Tendrá la misma suerte tu sobrino?

No, Carlos, debes valorar muy bien el escenario que has construido y el que se te aproxima. Se la persona sencilla que eras sin tus actos de prepotencia, las caravanas interminables ni de andar regañando por todo a tus amigos y colaboradores,  sólo  porque no se portan como tú quieres.

Tienes aún oportunidad de  limar asperezas.  El tiempo en el gobierno se te acaba y lejos de haber conseguido la admiración y el agradecimiento del priismo, hay un enorme desencanto.  No sé si éste sea mayor al  que muestran los aguascalentenses en general pero sigue creyéndose que únicamente trabajaste para el beneficio tuyo, de tus compadres y de quienes te hablan al oído.

Debes entender que no  se gobierna sólo con lo que intentas vender en los medios de comunicación.

Aunque no quieras reconocerlo, tu administración a estas alturas prácticamente se encuentra concluida porque ya todos volteamos a ver a tu sucesor.

Te insisto, aprovecha esta etapa final de tu gobierno para reconciliarte con quienes debes y muy especialmente, en cuidar bien las cuentas de tus negocios.

Sin duda que lo relacionado a tus operaciones con Nissan, los fideicomisos de parques industriales,  la famosa concesión de taxis ecológicos, las cuentas descuadradas en el Instituto de Educación y hasta la construcción de tu casa blanca,  es lo primero que te van a cuestionar. Por cierto a ver si nos invitas a tus viejos amigos a la reinauguración de tu casa en el Obraje y volver a juntarnos como aquellos tiempos en Las Américas.

Estamos en los meses de recuperar la confianza agotada en estos cinco años.  No nos sigas defraudando ni continúes en las prácticas de la guerra sucia, mucho menos si es gente que pertenece a tu partido. A pesar de todo, quienes respaldamos tu aspiración a la gubernatura hoy te damos el voto de la confianza en que sabrás recapacitar.

Recuerda que, aunque somos menos,  quienes quedamos en pie somos  TUS AMIGOS.

Noticiero El Circo