- 3 pistoleros ingresaron y amenazaron al sacerdote ecónomo para llevarse el dinero
- Escaparon en una camioneta robada y que resultó ser utilitaria de Gobierno del Estado
AGUASCALIENTES, AGS.- Tres delincuentes tomaron por asalto el Seminario Diocesano de Aguascalientes y a punta de pistola se apoderaron de un millón de pesos en efectivo, producto de la colecta anual para la manutención de los seminaristas.
Los hampones llegaron a la institución a bordo de una camioneta utilitaria de Gobierno del Estado y en ella se dieron a la fuga para luego dejarla abandonada calles más adelante, por lo que fue asegurada por las autoridades, que establecieron que era robada.
El atraco a mano armada sucedió el lunes 3 de abril, alrededor de las 12:30 horas, en las instalaciones del Seminario, ubicadas en la calle Olivos y la avenida Paseo de la Cruz, en el fraccionamiento Jardines de la Cruz.
Los tres hampones arribaron a bordo de una camioneta Nissan Pick-Up, en color blanco y con placas de circulación AE-52-951 de esta entidad e ingresaron al Seminario aprovechando que el portón eléctrico se encontraba abierto.
El que la conducía se quedó en el estacionamiento, mientras que los otros dos descendieron de ella y se dirigieron directamente a la oficina de economía, donde se encontraba el sacerdote ecónomo de la institución, Roberto Torres Valenciano.
Los tipos lo amagaron con armas de fuego, al parecer escuadras, y lo despojaron de una bolsa en el que contenía el millón de pesos en efectivo, reunido durante la pasada colecta anual.
Con el dinero en su poder, los dos delincuentes regresaron con su cómplice y abordaron la camioneta para escapar a toda velocidad, tomando la calle Olivos hacia el fraccionamiento Jesús Terán.
Los delincuentes dejaron abandonada la camioneta sobre la calle Ignacio Manuel Altamirano de dicho fraccionamiento y, al parecer, huyeron en otra unidad de motor.
El violento asalto fue reportado a las autoridades, por lo que al Seminario acudieron elementos de las Policías Municipal, Estatal y Ministerial, que tomaron cartas en el asunto y se movilizaron en busca de los responsables.
Al cabo de unos minutos lograron encontrar abandonada la camioneta en que huyeron, logrando conocer que había sido robada el sábado 1 de abril.
El sitio donde fue ubicada se acordonó hasta la llegada de elementos de la Dirección de Investigación Pericial, que la revisaron en busca de evidencias que les ayudaran a identificar a los ladrones.
Trascendió que el millón de pesos robado sería utilizado para la manutención de los seminaristas.
Las autoridades ministeriales iniciaron una investigación para establecer quién o quiénes conocían los movimientos al interior del Seminario y sabían que el dinero recolectado iba a estar en la oficina de economía.
El inmueble cuenta con cámaras de seguridad, cuyas grabaciones comenzaron a ser revisadas por los investigadores para tratar de identificar a los asaltantes.